domingo, 27 de diciembre de 2009

El salto de la musa

No puedo escribir. las palabras se esconden como niños correteando entre columnas.
conozco la razón de ese sin sabor que rodea mi pluma... se van apareciendo frente a mi las mieles del olvido.

Mire haciá la ventana y ya no había nada más allá del paisaje común. respire, inhale, exhale y no sucedió nada... nada... el olvido ha cobrado todo. Busque más al fondo en la memoria, más allá de lo que la desesperacion alcanza. No aparece nada... dulce olvido.

y entonces recuerdo porque olvide...

DE traje griego al lado del edificio, Sus cabellos largos y sinuosos se movian al son de la tarde al borde del piso más alto. sintio que debía dejar su cuerpo bailar al ritmo del viento al tono del vacio, quiso dejarse caer en las manos de ese impulso agresivo... y así fue.nada malo sucedio..., cayo suavemente en exquisitas burbujas de emociones , rodó rodó y rodó hasta que llego dónde esta ahora.... en dónde yo no la puedo encontrar.


Se fue de mis manos, la he olvidado. rodó tan lejos que ya no la he posido encontrar. ¿Comó llegue hasta aquí? ¿Cuándo fue que ella saltó tan lejos?. Desde ese momento ya no tengo fiestas embriagantes de inspiración, ahora hay olvido hay un susurro dormido que se contonea de vez en cuando y que extraña lo que provocaba que esta pluma escriba.

No hay comentarios: